Recuerdo el primer día que la ví, no cruzamos palabra pero me quedé observándola largo tiempo.
Siete años hace desde aquella primera impresión, y desde que empezaste a ser pilar esencial en mi vida.
Mujer paciente, serena, altruista, noble, sensible y fuerte a la vez, libre de prejuicios e infinitamente bella en todos los sentidos.
A ella le envuelve la transparencia y en su mirada se adivina todo lo que la mueve por dentro.
Hoy cumple 22 preciosos años y es curioso cómo hemos vivido juntas el paso de ser niñas a ser mujeres, y un año más le doy las gracias por seguir nutriéndome de lo mejor de sí misma.
Y yo, hoy (y como siempre) le deseo toda la felicidad del mundo!!